AGENDA LITERARIA XI
Un texto es una obra abierta, dirigida a una sucesión indefinida de posibles lectores. La experiencia de la lectura conlleva no sólo conocer lo deducible que porta un texto, sino y fundamentalmente la posibilidad de llenarse de sorpresas y realidades mágicas.
La objetividad de la obra nos lleva a la explicación y la apropiación subjetiva de la misma, a la comprensión.
Respecto de la explicación, Beardsley dice que una buena explicación satisface dos principios: el de la congruencia y el de la plenitud.
Un texto es una totalidad escrita. LLevar un texto al lenguaje es siempre algo distinto que oir a alguien y escuchar sus palabras.Un texto es un espacio de significación autónoma entregado a la interpretación única del lector.
La lógica del sentido está en relación con la correspondencia del emisor con su receptor.
La obra es un fenómeno de escritura que en lugar de estar dirigido únicamente a usted se dirige al lector que el mismo crea.
La objetividad de la obra nos lleva a la explicación y la apropiación subjetiva de la misma, a la comprensión.
Respecto de la explicación, Beardsley dice que una buena explicación satisface dos principios: el de la congruencia y el de la plenitud.
Un texto es una totalidad escrita. LLevar un texto al lenguaje es siempre algo distinto que oir a alguien y escuchar sus palabras.Un texto es un espacio de significación autónoma entregado a la interpretación única del lector.
La lógica del sentido está en relación con la correspondencia del emisor con su receptor.
La obra es un fenómeno de escritura que en lugar de estar dirigido únicamente a usted se dirige al lector que el mismo crea.
Etiquetas: Ricoeur-lenguaje-explicación-comprensión-explicación-recepcion-
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home